Andrew Páez: “Cuando me tocó jugar eran lamentables los campos de juego”
Luis Vílchez / @lvilchez8.- “Si Dios hubiera querido que jugáramos al fútbol en las nubes hubiera puesto hierba allí”, es una de las frases icónicas del mítico entrenador inglés Brian Clough. Para desplegar un fútbol vistoso y propositivo una de las claves es contar con un gramado en buenas condiciones. Esa fue una de las motivaciones de Andrew Páez, que en su etapa de jugador padeció de campos en mal estado y ahora se encarga, con su empresa APM Deportiva, de hacer que el césped de los estadios criollos parezca una alfombra. En Balonazos hablamos con Páez sobre: ¿cómo es el proceso de cambiar una grama? ¿Diferencia entre la natural y la sintética? ¿Claves de un buen mantenimiento? Y, por su puesto, sobre la actualidad del fútbol venezolano.
¿Cuáles son los parámetros para determinar que hay que cambiar un gramado? Para realizar la remoción completa de un campo de fútbol y hacer su corrección total existen varios parámetros que hay que analizar, que son cuando tú no puedes corregir con un mantenimiento o un trabajo específico la parte deteriorada. Hay varios aspectos fundamentales para tener en cuenta: uno es la nivelación. Cuando hay problemas de nivelación marcada y esos problemas de desnivelación están causando inconvenientes graves como lesiones a los futbolistas o que el tránsito de la pelota no sea el correcto, ese es uno de los aspectos que puede obligar a un club o una institución a tomar la decisión de renovar el campo de fútbol.
Por otro lado, cuando el gramado ha sido contaminado y no se puede combatir a través de herbicidas selectivos y su porcentaje de contaminación ronda el 40 o 50 por ciento, eso es otro indicativo de que el campo debe ser removido y cambiado nuevamente. Otro de los aspectos que implican la remoción de un campo de fútbol es cuando tú quieres adecuar un campo que pudo haber tenido una vida útil en su momento y fue construido con material orgánico, tierra negra en su base, eso ocasiona problemas de compactación y por ende existen inconvenientes en el sistema de drenaje y ocasiona la complicación de que no se puede jugar al fútbol cuando llueve. Esos tres aspectos son fundamentales para tomar la decisión de levantar un campo y restituirlo por un gramado nuevo.
En condiciones normales, que no haya complicaciones con el sistema de riego o drenaje ¿Cómo es ese proceso de remover la grama y plantar otra? ¿Cuáles son los pasos para seguir? Cuando ya se decide la remoción de un campo de fútbol hay que intervenir en todos los aspectos. Si el campo tenía sistema de riego muy posiblemente hay que renovarlo, porque cuando tú quieres restituir un campo de fútbol tú debes intervenir el área con maquinaria pesada, donde vas a hacer cortes y remociones. Seguramente te vas a llevar el sistema de riego en dichas labores. Indudablemente rescatando los aspersores y las válvulas, que el campo ya las tenía en buen estado. Los pasos son muy claros, lo primero que hacer es el corte y la remoción de las capas vegetales del césped. El espesor lo va a indicar cada proyecto.
Una vez que has hecho el corte y la remoción del material existente que queda a nivel de subsuelo, lo normal que debe hacer una compañía de ingeniería deportiva es un estudio de suelo y del comportamiento del sistema de drenaje. Posteriormente tomar la decisión de mantener ese sistema de drenaje, reconstruirlo o hacerlo uno nuevo si no lo tiene inicialmente. Si vas a dejar el sistema de drenaje se pasa a incorporar la nueva capa de enraizamiento. En el caso de nuestra compañía aconsejamos utilizar un grano de arena media, tratada para ser lo más aséptico posible, para que no traiga contaminación. Inicias tu colocación del metraje cúbico con el cual tú tienes que construir la nueva capa de enraizamiento, nosotros aconsejamos capas superiores de 1800 m³ de arena. Luego procedes a hacer las capas de nivelación macro que se hace con un patrol de nivelación o motoniveladora, posteriormente haces una micro nivelación que lo puedes hacer con una niveladora laser, que te va a dar el acabado final y el estándar de internacionalidad de un campo de practica de fútbol profesional. Una vez que tienes el nuevo suelo procedes a construir la nueva red de riego, de acuerdo con el diseño que elijas. Con el sistema de riego operativo procedes a colocar el nuevo gramado.
En cuanto a la colocación del nuevo gramado tienes dos posibilidades, la que más se utiliza en nuestra compañía es la siembra por estolones y procedes a dar 90 días de consolidación para hacer la entrega del campo, como tú has visto en las canchas que hemos entregado en el fútbol venezolano. La otra escuela es la siembra por panelas, cuando hablamos de campos de nivel internacional, porque acá no hay la suficiente experticia o maquinaria para poder trasladar 8000 metros cuadrados de grama para ser sembrados en una cancha. Nosotros hemos hecho algunas veces esta siembra, tenemos equipos de paneladoras, que sacan de nuestro vivero las panelas con el grosor específico para ser colocado. Pero es un trabajo sumamente costoso y meticuloso para mantener la nivelación que te ha dado la nivelación laser.
Disculpe que lo interrumpa, pero ese proceso de siembre de panelas es el que se suele ver en Europa, ¿no? Sí, es el que ves en Europa, donde llegan 50 camiones cava, que vienen desde Eslovenia u Holanda, dependiendo de donde hayan comprado el metraje que necesitan de grama. Son trasladados en camiones especiales con refrigeración y son instalados por maquinas que lo colocan como un rompecabezas de alfombras grandes. Hablamos de dos u ocho m² cada una. Eso es un trabajo que se hace con suma velocidad, pero son sumamente costosos. Hacer un proyecto completo en esa estándar ronda los cuatro o cinco millones de euros, cuando aquí haces un campo completo con 300 mil dólares, con todo y el trabajo de remoción.
Cuando lo interrumpía me hablaba de ese proceso de remoción y los 90 días de consolidación. Si puede seguir desde ahí… Sí, 90 días de consolidación porque recuerda que nosotros hacemos la siembra de estos campos con estolones. Esto consiste en colocar cada estolón individual sobre la superficie de juego y a través del proceso de consolidación hacer que: germinen, que peguen y empiece todo el crecimiento de esa comunidad de una misma especie de gramínea. En este caso gramado Tifway 419, que es el recomendado para las condiciones climáticas de nuestro país.
Venezuela tiene diferentes tipos de climas, por más que no tenemos cuatro estaciones, sino dos. No debe ser lo mismo lo que vive un gramado en Maracaibo a uno en San Cristóbal o Maturín ¿Cómo se hace en esos casos? ¿Hay diferente plagas por el clima? En cuanto a la climatología somos similares, a pesar de que tú puedes decir que Mérida tiene un promedio más bajo de temperatura de lo que puede tener Maracaibo. Pero recuérdate que estas gramíneas tienen un compartimento o una tolerancia a un ancho de banda en referencia a la temperatura. Aquí lo que afecta es el problema que vive todo el país a nivel energético y de suministro de agua. Eso el factor primordial como enemigo de los campos y de todas las actividades que estamos desarrollando en el país.
Si tuviésemos agua y electricidad en todas partes igual, no tendríamos ningún problema. Fíjate que nosotros acá nos estamos enfrentando a racionamientos de 14 horas diarias y sufrimos para el mantenimiento del estadio Metropolitano de Mérida. Cuando hay luz, aparte de la pandemia y el cerco epidemiológico que estamos atravesando, tenemos que aumentar los riesgos para combatir el problema de falta de luz y de agua. Pero el gramado, la bermuda Tifway 419, tiene problemas en temperaturas inferiores a los 10 grados, donde empieza perder latencia. Pero nosotros no tenemos cuatro estaciones y por eso es la grama recomendada para Venezuela.
¿Y con las plagas es igual? En eso tiene la razón, cada entorno puede tener plagas propias. Para todos los problemas de orden sanitario existen los controles fitosanitarios y preventivos. Con un buen departamento de mantenimiento no debes tener problema alguno, puede ser que en algún momento te sorprenda un tipo de plaga. Como nos está sorprendiendo el coronavirus. Puede ser que aparezca algo con lo que tú no contabas en tu plan preventivo de mantenimiento, pero haciendo una vez la detención de la plaga que estas enfrentando, existen los químicos necesarios para atacarlos y solventarlo.
¿Qué consejos da para el mantenimiento de las canchas en este contexto de cuarentena? Te pongo el ejemplo de nosotros que estamos encargados del mantenimiento del estadio Metropolitano de Mérida. Hemos generado un plan de contingencia, en el sentido de atender el cerco sanitario y epidemiológico, que se está pidiendo en el mundo entero. Diseñamos horarios de trabajo con un mínimo de personal. Hemos cambiado los ritmos de fertilización para bajar el crecimiento de la grama y poder reducir el número de cortes semanales.
Iniciando la cuarentena tomamos la iniciativa de contar con un control fitosanitario que nos dé una cobertura de 90 días. Nosotros en el estadio Metropolitano estamos desarrollando la labor para mantener el campo de la mejor manera y que el día que se pueda volver a jugar al fútbol, los atletas puedan conseguir la cancha de la mejor manera posible, luego de todo este periplo que estamos viviendo.
En el caso del estadio Brígido Iriarte ¿Afecta o beneficia este parón para que la grama crezca? Ahí sí es un problema y lo afecta de forma importante, porque habíamos finalizado la capa de enraizamiento y la semana de la cuarentena íbamos a iniciar la construcción del sistema de riego, que tomaría 10 días, y se tuvo que parar. Llevamos tres anillos de los cuatro, pero debimos parar la obra siguiendo las indicaciones del gobierno nacional. Estamos con la obra paralizada en ese aspecto.
No queremos que ninguno de nuestros trabajadores pueda correr riesgo. Hay situaciones que no se pueden llevar a cabo, hacer el verticut de nuestro vivero, que queda a dos horas de la ciudad de Mérida, no se puede hacer. No se podría trasladar el gramado a la ciudad de Caracas. Tampoco los fertilizantes ni de asegurarnos de que los problemas de agua que enfrenta el Brígido Iriarte, que ya se iban a solventar con camiones cisternas, para que en pudiéramos realizar la siembra. Eso lo atenderemos una vez finalice el cerco epidemiológico.
En primera división está el caso del estadio Misael Delgado que está cambiando de césped sintético a natural, pero muchos clubes para las sedes de sus divisiones optan por la grama sintética. Uno infiere que es por el tema económico. ¿Cuánto varía hacer un trabajo de grama natural y uno de sintético, incluso uno mixto? Mixta es impensable. Si hablábamos el costo de hacer un gramado por panelas, la mixta es impensable en este momento de Venezuela. En cuanto al gramado sintético, mi compañía también está especializada tanto en grama natural como sintético. Mi primera recomendación, que la hago como ingeniero y exjugador de fútbol, a cada club que me solicita es la grama natural. Para mí lo que se juega en grama sintética es soccer, pero fútbol no es.
A pesar de la calidad, yo trabajo con uno de los mejores sintéticos y con todo el manual técnico que nos obliga, porque tengo una licencia expedida por ellos, tengo que seguir especificaciones de esas obras sintéticas. Nunca será igual jugar sobre gramado sintético que en uno natural. En condiciones como las que tenemos en Venezuela, con la climatología que tenemos en el país, siempre aconsejo sembrar grama natural sobre sintético. Hay tabúes que se han hecho un espacio dentro del folklore deportivo, que habla de que mantenimiento del gramado natural es sumamente costoso, eso es totalmente falso. Que es sumamente difícil, eso es totalmente falso. Que no aguanta tanto tráfico y eso es totalmente falso, cuando son campos de fútbol 11 y grama natural.
Siempre pongo el ejemplo de nuestra Academia Emeritense, donde tenemos 450 jugadores, el campo lo construimos en 2002 y jamás ha habido que renovarlo, ni que hacerle reparaciones externas. Nuestro equipo de trabajo son solamente un operador y una ayudante, con eso se mantienen 22.000 m² de grama en dos campos y medio. Lo que sí es que debe haber un mantenimiento constante, pero el gramado sintético también requiere un mantenimiento y un sistema de riego, que acá en Venezuela no se estila, ya que sirve para bajar temperaturas y asegurar la posibilidad de jugar en climas de altas temperatura, además de evitar lesiones.
La otra razón por la que recomiendo la grama natural, porque está comprobado científicamente que la proporción de lesiones que hacen vida en grama sintética aumenta entre el 40 y el 60 por ciento, con respecto a los equipos que hacen vida en grama natural. Si tú haces un estudio de la cantidad de jugadores con rotura de ligamento, por ponerte un ejemplo del fútbol español, donde proliferan los campos sintéticos en el fútbol base, porque tienen las cuatro estaciones, y quieren ahorrarse los problemas en tiempos de lluvia y las bajas temperaturas, la diferencia es asombrosamente con la cantidad de lesionados.
Recomiendo la sintética si vas a hacer campos de alquiler de fútbol cinco, que tienen que jugar en espacios de 700 m², unas 20 personas. La aconsejo por el uso que le vas a dar. Si son campos de fútbol trato de abrirles los ojos a los clientes, que construyan un campo de césped natural que es cinco veces más económica y la prestación es totalmente superior a la sintética.
En Inglaterra el cuidado de la grama es un tema cultural, incluso en la Premier League se premia al encargado que mejor mantenimiento hace, ¿Cuáles son esa medida o el ABC para hacer un buen mantenimiento de una cancha? El problema es que las condiciones son totalmente diferentes. Acá pocos clubes tienen sus ciudades deportivas, algunos tienen que usar sí o sí el campo de juego como campo de entrenamiento. Cuando me hablas de la Premier League son campos que son pisados solamente el número de veces que juegan, el resto tienen sus ciudades deportivas propias. Acá los campos no son propios de los clubes y tienen que cumplir a veces con compromisos con las asociaciones de fútbol del estado o entes gubernamentales.
Lo primero que recomendamos es, por favor, entregar las canchas a compañías especializadas en mantenimiento de gramado deportivo. Donde tiene que haber una persona encargada de diseñar un plan de mantenimiento preventivo, que tenga conocimiento en mantenimiento correctivo y que puedan los clubes entender que, si quieren un campo lo más cercano al futbol internacional, tienen que reducir las horas de uso. No es que los campos no los aguantan, porque sí lo hacen. Ves el Olímpico de Caracas, que está aguantando tres o cuatro equipos jugando, pero tú no lo vas a ver con el verdor o la misma densidad si la cancha solo fuese usada el domingo.
Lo primero es otorgar el mantenimiento a una compañía especialidad, que se le de autonomía para desarrollar una planificación preventiva y estipule espacios de tiempo para hacer correcciones, además de atender las indicaciones que se les dan. Siempre les digo a los clubes que si necesitan un jardinero, no llame a mi compañía. Si usted quiere una compañía de ingeniería deportiva, estamos completamente a la orden, para asesorarlos y desarrollarles un trabajo que le permita que su campo de juego en buenas condiciones.
Una vez escuche que los jugadores pueden saber que una cancha fue usada el día anterior, porque pueden sentir el “traqueteo” al pisar. ¿Es mito? Si ha habido rupturas o correcciones en sitios, como cuando tú ves que alguien hace un disparo y sale un pedazo pequeño de grama, la persona o compañía encargada la ha replantado y no tenido margen de tiempo para agarrarse sobre el suelo, obviamente se va a sentir la inestabilidad. Pero lo normal es que una vez que se haya disputado un partido, digamos se jugó el sábado y hay partido el domingo, la compañía haga las labores de corte, barrido y arenado. Es más mito que realidad.
En actualidad de Venezuela no es tan frecuente, pero muchas veces los estadios son utilizados como sedes de conciertos u otras actividades de masas. ¿Cuál es su recomendación para trabajar en esos casos? Eso, indudablemente, hay que enfrentarlo, no solo en nuestro campo, sino en el plano internacional. Muchas veces se realizan actividades como conciertos en este tipo de campos. Lo importante es que las personas que vayan a montar este tipo de eventos, el administrador pueda asegurarse de que se coloquen las estructuras lo más cercano a la hora del espectáculo y una vez finalizado, retirarlo lo ante posible. Para que afecte lo menos posible.
Otro punto importante es el número de personas que van a estar sobre el campo de juego, porque eso muy poca gente lo evalúa. Tú puedes colocar una superficie que se pone sobre distintos sitios de la grama, pero está sobre el aire a un centímetro del gramado y la gente dice que no está afectando. Pero sí está afectando, si el número de personas que está sobre el gramado es excesivo. Si en los aeropuertos los sitios donde el pavimento es mayor, es donde los aviones están reposando, a diferencia de la pista de aterrizaje, que el avión se va desplazando. Donde el espesor es más grande es donde descansan.
Porque si tú metes 20 mil personas sobre un campo de juego, indudablemente la compactación de suelo va a ser abismal, porque tienes que multiplicar 20 mil por un promedio de 60 kilos, eso es una buena cantidad de toneladas que está recibiendo el suelo. Cuando lo normal que en un día domingo soporte el peso de 22 personas por los kilos que cada uno tenga. Cuando se produce ese tipo de eventos que generan una compactación, seguidamente hay que hacer un trabajo de des compactación y un mantenimiento mayor, para asegurar que la superficie esté lo mejor posible.
Usted que fue un buen mediocampista y es un amante de ese buen fútbol que se pregona en la región andina. ¿Cuál es la importancia de tener una buena grama para el jugador habilidoso? En primer lugar, esa fue mi motivación. Esa fue la razón por la que entre en este negocio, porque cuando me tocó ser jugador de fútbol profesional eran lamentables los estados de los campos de juego en el país. Cuando uno iba, por cualquier tipo de competición a jugar internacionalmente, pasando de Cúcuta hasta la Patagonia los campos era impresionantes, nos llevaban una morena. Eran campos de buen nivel y aquí se jugaban en campos deplorables. Ese era mi motivación para que los futbolistas puedan desarrollar el futbol de la mejor manera.
Pero, lamentablemente, y aprovecho este espacio para comentarlo, veo con suma preocupación el estilo de juego y de fútbol que se está desarrollando en el país. Creo que para el estilo de juego que se está desarrollando en Venezuela, le caían mejor los campos que teníamos en mi época. Son pocos los equipos que quieren jugar al futbol. Hoy se apuesta más a correr y meter, que a jugar. Lo digo y, aunque pueda herir susceptibilidades, pero la figura más importante dentro fútbol profesional venezolano son los preparadores físicos, porque los equipos lo que hacen es correr.
En línea con su respuesta, ¿cómo ha visto la evolución en los gramados del país? Indudablemente que ese cambio ha existido, los jugadores también lo ves que hay más jugadores beneficiados por el estado del terreno. Pero sigo insistiendo que, si en Venezuela nos dedicáramos más a jugar, más a desarrollar un estilo de juego, en el cual se juegue más y se corra menos, van a aparecer jugadores de enorme talento, porque tenemos por todos lados grandes jugadores, pero seguimos apostando a los futbolistas: musculosos, a los fuertes, a los jugadores de equilibrio que aportan poco al desarrollo del juego y no llaman a la gente a los estadios.
Eso para acercarnos más al concierto del juego internacional. Si tú ves los resultados de nuestros equipos en Sudamericana y Libertadores son lamentables. No hay forma de esconder la diferencia futbolista, porque lamentablemente acá en Venezuela queda campeón el que más corre. Pero no se juega.
¿Cuál es la importancia de una buena grama en las categorías formativas y en el profesional para ver cada vez más esos grandes jugadores? La grama es un factor fundamental, indudablemente. Pero si detrás de la grama no existe alguien con un mensaje claro hacia su equipo y que lo importante es desarrollar un juego: ofensivo, posicional, donde la pelota corra más que el jugador, donde el jugador pueda encontrar sincronismos y asociaciones para desarrollar su juego. Pero si nos preocupamos más en: la intensidad en la cual se desarrolla, en la presión, en la recuperación, en que hay que correr tantos kilómetros, en que hay que tener tanto porcentaje de grasa… Así usted tenga el Santiago Bernabéu o el Camp Nou, usted no va a jugar el fútbol.
Usted verá chispazos de futbolistas, de fútbol de equipo, pero lo que estoy diciendo lo corroboran los resultados en fútbol internacional. Eso no hay que esconderlo. Si a mí mañana, que tengo una Ford FX4 que es mi camioneta, me dan un Ferrari, yo lo voy a manejar como manejo mi Ford FX4, yendo en la autopista entre 80 y 100 km/h, porque no soy piloto de Fórmula 1. Dentro de Venezuela debe existir un cambio dentro de los directores técnicos y los presidentes de clubes, para aprovechar el parón y hacer un vuelco hacia la esencia de futbol.
Yo que manejo una escuela de fútbol y tú agarras a los niños de siete años y le dices: “¿Cómo quien quieres ser?” Desde el arquero hasta el delantero te van a decir como: (Lionel) Messi, (Cristiano) Ronaldo, (Kylian) Mbappé o Neymar. No he visto el primero que me diga quiero ser como (Gennaro) Gatusso, ojo, que son jugadores validos e importantes. Pero la esencia del fútbol, desde el primer día, es querer jugar bien.
